¿Los fondos buitre te pueden embargar?
Una notificación de que un fondo buitre ha comprado una deuda siempre es motivo de preocupación para el deudor. En estos casos, la consecuencia más temida es la posibilidad de sufrir un embargo. Por esta razón, son muchas las personas que se preguntan si un fondo buitre puede llegar a embargar, y en este artículo vamos a dar la respuesta.
¿Un fondo buitre puede embargar?
No, un fondo buitre no puede embargar a nadie. Aunque haya comprado una deuda a la entidad que era acreedora en origen, el fondo buitre no tiene la potestad de embargar los bienes del deudor, en ningún caso. Ninguna empresa ni particular puede conseguir esta medida por su cuenta, ya que la ejecución solo se puede ordenar judicialmente.
Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que los fondos buitre no pueden embargar, pero sí pueden provocar un embargo. De hecho, es algo que sucede muy a menudo.
Si un fondo buitre compra una deuda, lo hace esperando una rentabilidad muy importante, a la que no va a renunciar (estas empresas adquieren las deudas por un valor muy por debajo del que tienen, pero luego exigen su pago completo al deudor). Por ello, si el deudor no paga después de que la propia entidad le requiera para ello (a veces, de forma verdaderamente insistente), cabe esperar que lo demande para ir al procedimiento monitorio.
En el monitorio, el juzgado, después de comprobar la exactitud de la cuantía de la deuda (o de corregirla y proponerle la cantidad correcta al solicitante), notifica al deudor para que la pague en un plazo de 20 días, o se oponga. Si no sucede ninguna de las dos cosas, se abre la posibilidad de que el demandante solicite ejecución, para que se embargue al deudor. Como es obvio, esto puede ocurrir también si el deudor se opone y finalmente no se le da la razón.
Así pues, un fondo buitre nunca puede embargar, pero esto no quiere decir que una deuda con un fondo buitre no pueda acabar en un embargo; de hecho, es algo que muy probablemente ocurra en caso de continuar el impago.
La Ley de la Segunda Oportunidad como solución para cancelar deudas
En caso de haber contraído deudas y no poder hacer frente a su pago, existe una opción totalmente legal a disposición de los deudores en situación de insolvencia: acogerse a la Ley de la Segunda Oportunidad.
Este mecanismo legal permite a deudores insolventes cancelar total o parcialmente sus deudas y paralizar todo tipo de embargos.